sábado, 29 de diciembre de 2007

Arde Buenos Aires

Con las manías en cada una de mis pecas, noto el peso de las manchas sobre mí. Y noto cómo, cuando agarro el lustra metales, la franela, y un par de floreros viejos, los froto y me sonrío, me voy festejando en el reflejo. Sensación de poder-lo-todo, o algo por el estilo. Como cuando terminás un sudoku, limpiás la humedad con Cif, conseguís que las fórmulas se repitan en el excel sin que salte error. Como cuando encontrás una respuesta y te fundís en un significante.

"¿Qué pasa en tu familia con el frío?"
No sé, supongo que nos sobra.

miércoles, 26 de diciembre de 2007

Quiero otra primavera en Paris

Paso a través de la cesta de comida, un albino se arrodilla y me besa los pies.
La desesperación me quita el hambre. Busco un silencio, un lugar donde llenarme de mi vacío, donde poder escucharme.
Es el tercer verano que nos encuentra juntos, festejándonos, agradeciéndonos. ¿Se podrá estar más solo?

Quiero cuando me cantaba para simular algo de la familia y el cuidado. El sol, el frío, las flores y nada de homenajes. Distancia.



(hagamos de cuenta que no nos conocemos
- qué
- no nos conocemos).
Antes de irme había hecho una lista de cosas que no debía olvidar. Me molestó, me harto de mis enumeraciones de-pendientes. No la respeté. Ni siquiera la saqué del anotador en el que yace junto a mis objetivos 2.008.

Me vieron llegar.
- Parece que recién hubieras salido de rehabilitación.
- No, vengo de Capital. Vengo de vacaciones.

Creo que quedó claro que no pienso pasar por rehabilitaciones de ningún tipo. Mucho menos de ese. Esto recién comienza y no le temo al subsuelo. Queda espacio hacia abajo, tanto como hacia arriba... Miro la playa, el mundo no es mío, pero a veces, como a mí, le gusta disimular. Entonces, estamos tumbados en la arena, al sol, al viento. Al mar no entramos, el infinito nos sigue persiguiendo.

- El regalo de recibida es cuando se aprueba la tesina.
Resigno la carrera, dudo que el regalo pueda ser un argumento de peso... he visto cómo se regala por acá.
Sí, me estoy haciendo un bonito masaje anal con la licenciatura. Y pienso continuar.
Guaranga y pajera.
¡Feliz Navidad!

miércoles, 5 de diciembre de 2007

Óleo

Como una ola, como aceitando lentamente...

El fin de año me sacude en el agua, me llena los ojos de arena, me oscurece la piel, me masajea el cuello, me abraza, me emociona, me sorprende, me abandona. Otro, otro año, me abandona.
Me regala, me coquetea, me embriaga, como un auto me frena, la automaticidad deshabilitada. Un poco de plastilina pero de la que te daban en el jardín, de la que tenía brillitos y te divertía tremendamente, de la que era toda posibilidades y creación.

Esa jungla de veranos llega. Viene con mucha música. No puedo más que agradecer el pequeño microclima en el que decidí coronar un año de riqueza de miserias y de misiones. Todo puede transformarse. Y todo puede ser luz.
Hoy todo puede ser luz, digo, mientras lamo el cañón de la pistola al acostarme... y sí, cada uno le reza a quien quiere.







.