martes, 19 de junio de 2007

Impresiona lo ensimismada que puedo estar... es cierto que ya no escucho... ya no veo...
Le había prometido a K que iba a limpiar un poco el C, eliminando esos mails que quedan pesando en el Outlook y acordándome luego de vaciar los Elementos eliminados, que sino no iba a servir de nada. Parece fácil, así dicho... pero creo que si hay algo de lo que me cuesta deshacerme es de las palabras... y ponerme a revisar uno a uno los mails no es trabajo que esté dispuesta a realizar, al menos no por ahora.
El primer mail data del 31/7/99... Los ordeno por tamaño, elimino todos, supervisando mínimamente, para no estar deshaciéndome de alguna joyita... Pero rara vez las joyitas llegan así.
Remitente... Hay algunas fuentes de las que claramente puedo prescindir del 99 hasta acá... (la mano golpea la nuca -solamente hasta acá-).

Los noté ahí, un grupo largo de no leídos, amontonados en el último período de mi vida... La Nada.
No quise detenerme en la fecha... me escribía la nada, yo no leí sus mails... pero sus mensajes siempre llegan.


Eficiente como la nada misma.