domingo, 20 de enero de 2008

The future is not ours to see

- Habituados, eso fue un poco lo que nos pasó.
- ¿Y ahora?
- Eso, ¿y ahora?
- Nada... corresponde que nos cuidemos.
- Mucho cuidado. No esperaba otra cosa de vos.

La frustración echa raíces.
- ¿Fuiste al médico? ¿Terminaste el libro? ¿Seguís escribiendo?
- Ajá.

Siento la realidad alterada y el sueño mal ubicado. No logro recordar más que imágenes sueltas de mis sueños, y siempre es algo referido al trabajo. Me altera. Me enojo con mi inconsiente y conmigo. Cambio de literatura, me doy duchas heladas, me estimulo.
No sé si lo logré, pero he comenzado a dormirme despierta. En medio de una conversación, dejo escapar frases claramente provenientes de un lugar otro, muy otro.
- ¿eh?
- qué
- ¿endulzar qué pastillas? ¿de qué hablás?
- perdón, sigamos.
No se nota, pero podría empezar a preocuparme.